Semilla para el Cambio cuenta desde hace comienzos del mes de abril con un nuevo grupo de voluntariado en Andalucía. Carmen Cobaleda, una antigua voluntaria de Barcelona que se ha mudado a Granada, y Beatriz Fernández, madrina y colaboradora habitual de Semilla en Almuñécar han sido el germen de este nuevo grupo al que se han unido además María Llanel, que visitó la ONG en Varanasi el pasado año en uno de los viajes de acción solidaria que organiza Open Eyes, Celia Pérez y Rocío de la Rosa.
“Tengo una conexión muy especial con India. Un país que me ha dejado huella y que forma ya parte de mí y de mi vida. No se puede olvidar lo vivido y lo visto… Todo muy intenso y tan diferente a lo que estamos acostumbrados/as”, comenta Beatriz Fernández, una de las voluntarias. Con estas cinco mujeres comprometidas arranca un grupo que, al igual que el que Semilla tiene en Euskadi, pretende actuar a nivel autonómico y organizar actividades en las distintas provincias.
“Es muy importante implicarse más en lo que nos rodea, en hacer de este mundo algo mejor, aunque sean pequeños actos puntuales, pues al final el fruto se va viendo. Y ese sentimiento de haber aportado algo positivo, aunque sea poco, es lo que realmente te hace más humano, más comprensivo y más empático. La consecuencia de todo esto es demasiado gratificante: primero te cambias a ti mismo, para mejor, después aportas a los demás. Y creo que eso es una de las experiencias más bonitas que una persona puede vivir. Da igual donde ayudes o aportes, sea aquí en España como en la otra punta del mundo, todos formamos parte del mismo planeta y hemos de preocuparnos por él. Considero que lo importante es hacer algo, y sobre todo con sentimiento en lo que se está haciendo”, explica Beatriz.
Nada más empezar ya se han puesto a trabajar en la iniciativa “Yoga para el Cambio” y en la organización de la cena solidaria que Semilla celebra cada año coincidiendo con el Día Internacional contra el Trabajo Infantil. “Nuestro principal objetivo es dar lo mejor de cada una, dar a conocer la situación real en Varanasi y cómo viven las comunidades de los slums, difundir vuestra gran labor y llegar al mayor número de personas que quieran colaborar o unirse en nuestra lucha de crear poco a poco un mundo mejor para todos/as”, transmite el equipo de voluntariado andaluz.
Desde aquí les damos la bienvenida a la familia de Semilla para el Cambio. ¡Gracias por vuestra valiosa labor!