El proyecto, que se suspendió durante la pandemia, ha comenzado de nuevo a funcionar y 6 mujeres de los slums trabajan con ilusión en la elaboración de nuevos diseños.
El pasado mes de marzo las puertas del taller de pintado de pañuelos de seda Marina Silk se abrían de nuevo tras dos años de inactividad a causa de la pandemia. Jordi Serra, voluntario de la ongd, ayudó en la reapertura del proyecto durante su visita a Varanasi. La actividad en este proyecto también está sujeta a las condiciones climáticas, que en Varanasi, debido a los meses de calor y humedad, se reduce a seis meses al año.
“Las artesanas estaban muy felices de retomar la actividad. Es un proyecto muy bonito y creativo. A ellas les encanta pintar los pañuelos”, afirma Hemant Raj Singh, coordinador de los proyectos de Mujer de Semilla para el Cambio.
Actualmente, Marina Silk cuenta con seis artesanas: Laltusi, Rajina, Piyari, Tajkeera, Baisun y Marina. Deepa es la supervisora del taller de artesanía y profesora del taller de Marina Silk. Ella les enseña nuevos diseños y cómo llevarlos a cabo en la seda, se le da muy bien dibujar y ahora es la encargada de guiar al grupo. “Está haciendo un buen trabajo y los resultados son muy satisfactorios. Deepa está dando lo mejor de sí, ya que el pintado de los pañuelos de seda requiere de mucha paciencia y dedicación. Es un trabajo duro debido al ambiente cálido y húmedo de Varanasi, ya que no pueden usar ventilador y puertas y ventanas deben permanecer cerradas mientras trabajan. Aun así no pierden la sonrisa y comparten muy buenos momentos pese a los grados tan elevados”, explica Hemant.
Y es que el trabajo en el taller de Marina Silk es muy laborioso ya que además de pintar, el material requiere todo un proceso de lavado, secado, vaporización y planchado. Actualmente hay un total de 20 diseños.
Marina Silk
Marina Silk fue el primer proyecto de empoderamiento de la mujer que Semilla para el Cambio puso en marcha en 2011. La empresa Marina Textil SL financió y apoyó el proyecto hasta que fue sostenible. Actualmente, el proyecto se autofinancia con las ventas de los pañuelos elaborados por las mujeres, que son comercializados en España y Europa, a través de la tienda online solidaria de Semilla para el Cambio y de los grupos de voluntariado y colaboradores de la ongd.
Las beneficiarias son mujeres de los slums de Sigra (Varanasi) que antes se dedicaban a la recogida de basura y que ahora trabajan en la elaboración de estos pañuelos artesanales, una ocupación creativa, digna y bien remunerada que les permite contribuir a la economía familiar, mejorar su autosuficiencia y autoestima y aumentar su influencia en la comunidad.