La directora de la ongd, María Bodelón, ha comunicado la decisión desde Varanasi, tras conocerse los primeros datos oficiales de contagio en India. Bodelón, que apoya a los colectivos más desfavorecidos de los slums de esta ciudad desde hace una década, analiza además, el alcance y los previsibles impactos que el coronavirus tendrá sobre la población más vulnerable. Un análisis que compartimos en la siguiente crónica de nuestra directora.
Crónica de María Bodelón
Como todos sabemos, el Coronavirus ha alterado y “puesto patas arriba” la vida de muchísima gente, en todos los rincones del planeta. En India no podía ser menos. La globalización y el flujo de pasajeros por trabajo y turismo de unos países a otros ha hecho que, en poco tiempo, se haya extendido el causante del Covid-19 más rápido y lejos de lo esperado, creando una pandemia mundial y un problema económico para todos, en un vano intento por contenerla.
En India, las primeras medidas de contención se pusieron en marcha a principios de febrero. Inicialmente, se cerró la entrada a viajeros procedentes de China y desde hace una semana, viajeros de la mayor parte de los países europeos o asiáticos con más contagiados: Italia, España, Francia, Irán, etc.
El sábado pasado, 14 de marzo, el gobierno indio dio orden de cerrar las escuelas e instituciones educativas, así como los cines, y se han paralizado eventos multitudinarios. India todavía está en la fase 1 (casos importados y primeros contagios directos) y oficialmente no ha entrado todavía en la fase 2 de transmisión dentro de la comunidad. Por tanto, por ahora no se han tomado medidas más drásticas, como cerrar todos los templos, ni los restaurantes, ni se ha dado orden de cuarentena masiva, aunque el gobierno aconseja evitar los viajes.
Pero teniendo en cuenta que India “oficialmente” tiene más de 100 personas contagiadas, creemos que debería llevar a cabo medidas más agresivas y rápidas para evitar que las transmisiones crezcan exponencialmente en pocos días, como hemos visto en otros países.
Teletrabajo, por prevención y responsabilidad
Ante esta situación, por prevención, la contraparte con la que trabaja Semilla para el Cambio en el terreno, ha decidido cerrar temporalmente. Pese a que todavía no se ha llegado al nivel de confinamiento, nos ha parecido lo más responsable. No obstante, el equipo en Varanasi prosigue sus actividades a través del teletrabajo, a la espera de ver cuál es la evolución del virus que, dadas las características geográficas, sanitarias y de población del país, seguro afectará a un porcentaje de personas significativamente mayor al que oficialmente existe hasta ahora.
Factores que hacen prever un impacto de gran magnitud
Pero, además, en nuestro análisis debemos tener en cuenta varios factores que pesan sobre India y otros países del Sur, que nos ayudarán a entender el más que previsible impacto del Coronavirus sobre la población del país:
- El 66% de la población de India sigue viviendo en zonas rurales; y en muchas aldeas el acceso sanitario es limitado.
- En las áreas urbanas, no obstante, el sistema sanitario es también muy deficitario, no tiene capacidad, ni recursos suficientes para atender muchos casos graves, y menos teniendo en cuenta el nivel de población del país.
- Por su parte, la higiene en India es también un grave problema. En un estudio reciente estimaba que en la India rural el lavado de manos está poco extendido. Sólo el 26,3% de la población lo hace antes de dar de comer a sus hijos (y lo hacen con la mano más que con utensilios). Si una de las precauciones principales contra el Coronavirus es el lavado de manos habitual, podemos imaginar el reto que esto supone en India para la lucha contra el virus.
- Si la higiene y el acceso sanitario son preocupantes para la población rural y urbana del país, esta preocupación es más extrema si cabe para las personas que en uno y otro ámbito sufren pobreza. Según el Censo de 2011, estaríamos hablando de unos 276 millones de personas en todo el país.
- La medida del confinamiento se complica en un país densamente poblado como India, en el que un alto porcentaje de la población vive hacinada o compartiendo una única habitación. En esos casos va a ser muy difícil que no se produzca el contagio de unos a otros.
- Además, en caso de cerrar empresas o confiar a las personas a sus casas, está el problema económico que ya está afectando a empresas, autónomos y empleados en los países ricos. Pero las personas empobrecidas, que en India aún son un alto porcentaje, viven al día, comiendo de lo que ganan. Si no pueden salir a ganarse el pan, no enfermarán de Coronavirus, pero pueden morir de inanición… Además, estas personas que viven en la pobreza extrema no cuentan con medios para acudir al médico o comprar medicinas. Si enferman, ni podrán trabajar ni podrán permitirse un tratamiento hospitalario contra el coronavirus.
- En los países ricos, una epidemia es algo de lo que hay muchas generaciones que nunca habían vivido en su vida. Pero en países como India de hecho ya se producen a menudo (cada 2-3 años) epidemias importantes como la fiebre tifoidea, el dengue, la malaria, etc. Debido a la gran población, el desconocimiento, la falta de recursos, las epidemias son una bomba de relojería en países como India. Estas epidemias, que en gran parte se podrían evitar o reducir con una buena higiene y más protección contra mosquitos y agua contaminada se cobran sin embargo miles de vidas de forma cíclica. Incluso la diarrea, fácilmente evitable con más higiene y un acceso sanitario básico, mata a más de 10.000 niños/as al año.
- La cifra oficial de casos a día de hoy en India supera los 130 casos y 3 muertes, pero estas cifras, probablemente, hayan cambiado hasta este preciso momento en el que te encuentras leyendo estas líneas.
- El protocolo de testeo por ahora en India es limitante. Existen 732 distritos en el país y hay solo 51 laboratorios equipados para hacer el test del Covid-19. Además el coste por test es de 5000 rupias (unos 60 €), que para India, igual que para otros países de bajos recursos, es un precio muy alto. Algunos componentes del test se importan de Alemania. Se empiezan a dar casos que probablemente sean de contagio comunitario, pero ahora mismo sólo se permite testear a gente que haya tenido un historial de viaje o haya estado en contacto con viajeros. En general, otros casos sospechosos se ponen en cuarentena, pero hay que saber que puede haber muchos otros contagiados leves o asintomáticos que transmiten la enfermedad. Y sin saber si algunos casos críticos son de Covid-19 o no cuando hay síntomas de neumonía y fallo multi-orgánico, los médicos no saben si están luchando contra una bacteria o contra un virus.
- Hay que tener en cuenta que en India la pirámide poblacional está invertida con respecto a Europa. A partir de 70 años, solo hay un 3,5% de la población. Aunque en uno de los países más poblados del mundo, estamos hablando de 4,7 millones de personas que son las más vulnerables al virus, según el comportamiento que éste ha tenido hasta ahora.
- Pero además,en India hay otros potenciales grupos de riesgo. En la clase media india muchas personas padecen enfermedades coronarias y diabetes. En noviembre 2019, el International Diabetes Foundation estimó que 77 millones de personas indias sufren de diabetes.; y, según la Organización Mundial de la Salud, India es el país del mundo con mayor número de muertes por problemas respiratorios. Por tanto, si el Covid-19 se ceba en personas con este tipo de patologías, es fácil concluir que el impacto sobre este sector de la población se prevé, también, de una magnitud enorme.
Concluyo este análisis preocupada pues, si no se toman medidas contundentes pronto el Coronavirus puede extenderse muy rápidamente, con consecuencias muy negativas en general, para toda la población, y muy especialmente, entre los colectivos más vulnerables. Precisamente se aproxima Chaitra Navratri, una celebración religiosa hindú de 9 días que se dedica a las nueve formas de la diosa Durga. Esta “novena” es uno de los festivales hindúes más fervorosos y dará comienzo el 25 de marzo con millones de personas asistiendo a rezos y ceremonias diariamente… Es el momento para cerrar templos y recomendar a la gente no salir a la calle antes de que sea demasiado tarde.