Semilla para el Cambio ofrece visitas guiadas a viajeros/as y colaboradores/as que pasan por la ciudad, ofreciéndoles así acercarse a la realidad de las familias con las que trabajamos, descubriendo en primera persona los resultados de la solidaridad.
Conocer los proyectos de Semilla para el Cambio de primera mano, ese es el objetivo de las visitas guiadas a la ongd en Varanasi, India, que se ha visto interrumpido durante los dos años de pandemia. Pero ahora, las puertas de la ongd se han abierto de nuevo y una docena de personas han pasado desde el mes de junio por nuestros centros de Sigra y Dashashwamedh para acercarse a la realidad de nuestra actividad y a las comunidades con las que trabajamos. Entre ellas algunas que apoyan la educación de niños y niñas en el programa educativo de la ongd.
Tal es el caso de Patricia Ibáñez, madrina de Sudhanshu: “La mañana que pasamos mi marido y yo en la sede de Sigra hablamos con María, quien nos enseñó los proyectos que tienen actualmente en la ongd. Pasamos un rato con los niños a quienes vimos comer, y también disfrutamos escuchando sus historias. Es la segunda vez que visito Varanasi y siempre que vengo me gusta visitar la ong y ver la estupenda y necesaria labor que hacen”, afirma.
Para Horacio también fue una experiencia inolvidable. Ellos tienen apadrinado a Pihu y pudieron pasar tiempo con él, visitar los distintos proyectos y conocer su funcionamiento e intercambiar impresiones con los coordinadores de los proyectos.
Y es que las visitas son una toma de contacto directa con los proyectos y los/as profesionales de Semilla para el Cambio, además de una gran oportunidad de conocer a los/as beneficiarios/as de los proyectos de la ongd. Así, los visitantes pudieron visitar el taller de artesanía, donde las mujeres de los slums elaboran los productos de la tienda solidaria de la ongd, el de corte y confección, salud, alfabetización y nutrición.
“En general, todas las visitas se muestran muy agradecidas y les encanta conocer la ongd y ver el funcionamiento de los proyectos. Para nosotros también es muy gratificante poder mostrar nuestro trabajo diario”, afirma Rumpa, coordinadora del centro de Sigra en Varanasi, India.