Después de dos semanas de limpieza y desinfección de nuestras instalaciones, y de formulación de nuevos protocolos de atención y funcionamiento seguro, hemos arrancado con los proyectos de artesanía, corte y confección, promoción de la salud, educación y el dispensario médico.
Arranca la actividad de Semilla para el Cambio en Varanasi, aunque solo parcialmente y con nuevas normas de atención y funcionamiento. Es la realidad a la que obliga una situación de crisis por la Covid19 en India, que registró un récord en el número de contagios, la semana pasada, alcanzando los 40.000 en tan solo 24 horas. En Varanasi, estamos teniendo unos 90 nuevos contagios cada día.
No obstante, y pese a que la pandemia continúa golpeando con fuerza al país, India se está desconfinando, con medidas más estrictas en las ciudades con más casos. En Varanasi se permite a la gente llevar a cabo ciertas actividades económicas, dado que una parte importante de la población depende del salario diario para poder sobrevivir, pero se han limitado los horarios para reducir el contacto entre personas.
En Semilla, esta ligera apertura ha precisado de nuevos protocolos y de medidas de seguridad, lo que nos han obligado a reinventar las dinámicas de trabajo y atención. Más orden para asegurar distanciamiento social y la seguridad de beneficiarias/os y del personal de nuestro equipo.
Proyectos de Mujer
Los proyectos de mujer han inaugurado esta primera etapa. Así, la primera actividad que realizamos fue una sesión formativa sobre la Covid19, dirigida a nuestras artesanas. Trabajamos cuestiones como la prevención y el autocuidado, tanto en el mismo taller de artesanía como en sus casas y comunidades. Una promoción de la salud que planteamos de manera más transversal que nunca a todos nuestros proyectos. Así, junto al desarrollo de las actividades propias de los mismos, éstos se convierten, también, en una herramienta para combatir los contagios, a través de la formación y la socialización de medidas preventivas entre las participantes y, por extensión, entre la comunidad de cada slum.
Las mujeres de las clases de corte y confección han vuelto también a la actividad. Tras más de cuatro meses sin recibir formación, los primeros días han consistido en repasar los conocimientos ya adquiridos. En la ongd nos preparamos, además, para iniciar, en breve, un nuevo grupo de nivel básico.
Educación online
Como anunciamos la semana pasada, hemos arrancado ya con nuestro proyecto educativo, en la modalidad online. Este mes, estamos trabajando para mejorar la experiencia y el aprendizaje. Para ello, ofrecimos sesiones formativas a nuestras alumnas y alumnos, y también apoyo a nuestro equipo. Hemos estado realizando sesiones formativas sobre esta nueva modelo de funcionamiento, no exento de retos, dada la limitación de recursos y acceso a internet del alumnado.
Si bien durante el confinamiento estricto pudimos seguir ofreciendo clases a través de mensajería móvil, ahora nos planteamos la necesidad de evolucionar esta modalidad para hacerla más interactiva. Esto pasa, obviamente, por internet y los recursos móviles; ambos escasean entre nuestras alumnas y alumnos. Por ello, estamos trabajando en soluciones colaborativas que permitan que ningún estudiante se quede atrás en estos meses de pandemia. Así, estamos trabajando para optimizar los recursos existentes en los slums y aquellos con los que contamos en Semilla para el Cambio. Soluciones que pasan por compartir dispositivos, socializar conocimientos y, dado el caso, ofrecer recursos a aquellos y aquellas estudiantes que, de ningún modo, puedan acceder a las clases online.
“También no preocupa mucho conseguir la continuidad de aquellos alumnos y alumnas desaventajados y poco motivados con el estudio. Vamos a tener que redoblar esfuerzos para que sigan las clases. Para ello, hemos hecho tutorías con los padres y las madres. Necesitamos que se impliquen en el seguimiento”, explica María Bodelón, directora de Semilla para el Cambio.
Todo esto también es nuevo para nuestro profesorado que, hasta ahora, no había impartido clases de este modo. Por ello, Rumpa Paul, Vivek Srivastava y Matías Carballido, miembros del equipo de coordinación de la ongd en terreno, han estado trabajando en la formación del profesorado, para el uso de servicios de comunicación de vídeo online.
Proyecto sanitario
Nuestro dispensario médico ha abierto también sus puertas. Éste fue uno de los proyectos en los que más esfuerzos invertimos para protocolarizar y, en definitiva, ordenar, el acceso. “Hemos tenido que delimitar espacios, para que los pacientes puedan esperar respetando la distancia social necesaria entre unos y otros”, explica María Bodelón. “Para evitar aglomeraciones, hemos hecho un trabajo previo a la apertura del dispensario. Para ello, ha sido fundamental el trabajo de nuestras promotoras de salud, que coordinan con el dispensario las citas y el flujo de usuarios/as para que no se junten muchos pacientes”.
Además, el dispensario ha incorporado otras medidas de seguridad médico-pacientes, para reducir al mínimo, en su caso, el riesgo de contagio.
El seguimiento a las mujeres embarazadas ha sido otra de la áreas del programa de salud que hemos retomado estos días. Se han realizado ecografías y analíticas y se han distribuido los suplementos alimenticios (hierro, ácido fólico, vitaminas, proteínas, minerales). En los próximos días, además, se incorporará la ginecóloga del proyecto, la Dra. Vandana. (Puedes volver a leer el post “Alimentación, embarazo e infancia en tiempos de coronavirus”, aquí)
Gracias por estar ahí
Durante las próximas semanas tenemos previsto ir retomando el resto de nuestros proyectos aunque todo está condicionado a la evolución de la pandemia. Os seguiremos informando de cada novedad. Mientras tanto, seguimos trabajando y cuidándonos.
Gracias, como siempre, por seguir ahí.